
RIO HURDANO ARRIBA
«Después del día de bien dormir, de un día tranquilo en Nuñomoral, los viajeros toman de nuevo el camino. Río Hurdano arriba van hacia la alquería de Asegur, hacia La Huerta y Casares. Entre el Lomito de la Madera, las canchas de Arromedio, la Mota de los Sembraos, El Espinal, ya en la raya de Salamanca, el Lombo Gavilán y el Lombo de la Carrasca hay un círculo de caseríos».
(…)
«A la izquierda es el río, a la derecha las lomas. El agua, en lo hondo, es una vena azul. No hay cultivos. En el monte, desde la margen de allá todo es piedra y una lejanía violeta. Encima, se aclara el cielo que cruza azul añil sobre la carretera hasta la otra lejanía de pinos. La margen de este lado se viene desde el pinar hasta otras piedras iguales y hasta la carretera y el río».
Armando López Salinas y Antonio Ferres. Caminando por las Hurdes. Seix Barral 1960. Pág. 129.
